A veces,
perdida vaga la memoria,
no se encuentra,
no ve su reflejo en el pasado,
ni se fija en el camino
hacia el futuro.
A veces,
se escapa la noción del tiempo,
y la razón deja escaparse,
entregándose al exilio
del delirio interno.
A veces,
me ausento si,
pero ese lazo que me une a ti,
hace retornar cada emoción
distorsionada por esencias turbias.
Tu eres mi paz,
la luz que me cobija,
que es mi faro,
entre mis viajes hacia la nada.
De allí vuelvo a tus brazos,
segura en tu pecho,
tus latidos me adormecen
envolviéndome en pensamientos,
donde mi mente se aclara,
y acomoda cada espacio
ocupado por el amor,
tierna amistad,
cálida sensación de armonía.
A veces,
me pierdo si.
Pero vuelvo a mi,
y soy nuevamente feliz
de que la distancia no sea mas
que una ilusión.
A veces...
soy esclava de mis errores.
Tan solo soy humana.
perdida vaga la memoria,
no se encuentra,
no ve su reflejo en el pasado,
ni se fija en el camino
hacia el futuro.
A veces,
se escapa la noción del tiempo,
y la razón deja escaparse,
entregándose al exilio
del delirio interno.
A veces,
me ausento si,
pero ese lazo que me une a ti,
hace retornar cada emoción
distorsionada por esencias turbias.
Tu eres mi paz,
la luz que me cobija,
que es mi faro,
entre mis viajes hacia la nada.
De allí vuelvo a tus brazos,
segura en tu pecho,
tus latidos me adormecen
envolviéndome en pensamientos,
donde mi mente se aclara,
y acomoda cada espacio
ocupado por el amor,
tierna amistad,
cálida sensación de armonía.
A veces,
me pierdo si.
Pero vuelvo a mi,
y soy nuevamente feliz
de que la distancia no sea mas
que una ilusión.
A veces...
soy esclava de mis errores.
Tan solo soy humana.
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